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- Concurso por subsidios de investigación sobre enfermedades infecciosas
LU17.COM, 18 de julio de 2019 - Se trata de un concurso competitivo y abierto que ofrece subsidios de hasta AR$3 millones por proyecto e impulsado por la Fundación Bunge y Born. La Fundación Bunge y Born (FBB) lanza por segundo año consecutivo este concurso con el fin de contribuir a la prevención, diagnóstico y/o tratamiento de enfermedades infecciosas a través de modelos de intervención efectivos, y que puedan ser escalados a las políticas públicas. La FBB está especialmente interesada en las enfermedades infecciosas que persisten en las poblaciones más marginadas: zonas rurales remotas, barrios suburbanos vulnerables o zonas de conflicto. En ese sentido, promueve la investigación aplicada y proyectos de investigación-acción que proponen un abordaje interdisciplinario, es decir, una genuina y sinérgica combinación de ciencias sociales y las denominadas “ciencias duras”. Los proyectos serán evaluados en función del grado de innovación, relevancia, capacidad para generar impacto en la población afectada y escalabilidad. Además, se considerará la calidad del equipo de trabajo, según las credenciales académicas, publicaciones, actividad docente y afiliaciones. El jurado está integrado por expertos de Argentina y el exterior, especialistas en bacteriología, micología, microbiología, parasitología y virología. Podrán participar investigadores argentinos que se desempeñen en instituciones sin fines de lucro, tales como centros asistenciales, universidades y centros de investigación. Los proyectos podrán tener una duración de hasta 24 meses. Para conocer las bases y condiciones del concurso, y acceder al formulario de inscripción, puede dirigirse a: https://www.fundacionbyb.org/post/nueva-convocatoria-de-subsidios-para-investigaci%C3%B3n Dos ganadores en 2018 El primero se propuso desarrollar una plataforma para diagnosticar en forma fácil y segura Chagas y leishmaniasis. El equipo de trabajo está a cargo de Patricio Diosque, director del Instituto de Patología Experimental – CONICET – Universidad Nacional de Salta (UNSa). El otro, estudiar las características particulares, inmunológicas y virológicas, en adultos jóvenes que contrajeron HIV por transmisión perinatal (en el embarazo, parto o lactancia), a cargo de Natalia Lorna Laufer, investigadora asistente de CONICET en el Instituto de Investigaciones Biomédicas en Retrovirus y Sida (INBIRS), Universidad de Buenos Aires (UBA). #infecciosas
- Descubren cómo el cáncer de ovario evade las defensas del organismo
Científicos del Conicet y de una universidad estadounidense hallaron un mecanismo que podría ser la llave de nuevas terapias. CLARÍN, 11 de octubre de 2018 - El cáncer de ovario es muy agresivo y no está respondiendo a las inmunoterapias. Cada año se detectan 240 mil casos nuevos en el mundo. Hace tiempo que expertos vienen indagando sobre las razones por las que estos tratamientos no resultan efectivos para esta patología oncológica. Ahora, científicos del Conicet junto con referentes de Weill Cornell University, de Nueva York, lograron contestar este interrogante. Y fueron por más: tienen una nueva estrategia terapéutica que permitiría tratar este tipo de tumores. “Cada tumor tiene distintos mecanismos de evasión, de escape. La inmunoterapia logra, en algunos casos, bloquear estos mecanismos para que los linfocitos (las células que nos defienden) puedan actuar. Eso está pasando en casos de cáncer de pulmón, melanoma y linfoma de Hodgkin, entre otros. No así con el cáncer de ovario”, explica a Clarín Gabriel Rabinovich, bioquímico e investigador superior del Conicet. Rabinovich y Juan Pablo Cerliani, investigador adjunto del Conicet, lograron entender el proceso por el que los linfocitos se paralizan o quedan “exhaustos” frente a estos tumores. “Cuando los linfocitos se acercan al cáncer, éste produce factores solubles que afectan el transportador de glucosa a las células (Glut 1)”, agrega Rabinovich. Los linfocitos necesitan de esa glucosa para la función respiratoria de la mitocondria, un componente vital de la célula para generar energía y evitar que se paralice. Las complicaciones sobre el transportador impiden este mecanismo. Existe un plan b para alimentar la mitocondria y lograr un efecto similar al de la glucosa, que se da a partir de la entrada a la célula de un aminoácido llamado glutamina. El problema es que “por la falta de ingreso de glucosa no se logra la glicosilación de las proteínas y esto hace que la célula sufra estrés y no permita el ingreso del plan b: la glutamina”, suma Rabinovich. “Lo que nosotros descubrimos ahora es que hay dos genes IRE1α y XBP-1 que gobiernan este estrés, que se conoce como estrés de retículo endoplasmático. En este sentido es que diseñamos una posible terapia que inhibe estos genes y permite que la glutamina ingrese. En este escenario, la mitocondria funcionaría, el linfocito recibiría la energía necesaria y, en principio, estaría en condiciones de combatir el tumor”, afirma Rabinovich. En la actualidad, el cáncer de ovario “se trata con cirugía y quimioterapia endovenosa o intraperitoneal”, explica Federico Bianchi, jefe de sección de Ginecología Oncológica del Hospital Alemán. “Lo sufren unas 240 mil personas al año. Tres de cada cuatro son diagnosticadas en estadíos avanzados. Esto tiene que ver con que no contamos con un método de detección precoz como sí ocurre con el cáncer de mama o de cuello uterino, por ejemplo”, detalla Bianchi a este diario y asegura que, por esto, las mujeres llegan a una consulta cuando ya tienen síntomas como malestar o distensión abdominal. Consultado sobre la investigación de la que formaron parte los argentinos, Bianchi aseguró que celebra la noticia. “Lo ideal sería que haya un método de detección precoz porque siempre lo primero es prevenir. Dicho eso, me parece perfecto que se avance para contar con nuevas estrategias terapéuticas”, sostuvo. El trabajo, publicado en la revista científica Nature, fue liderado por Juan Cubillos-Ruiz, de Weill Cornell University. También colaboraron Laurie Glimcher, del Dana Farber Cancer Institute de Boston; José Conejo García, del Moffit Cancer Institute, en Tampa. Rabinovich, que forma parte del Instituto de Biología y Medicina Experimental, viene trabajando en la temática escape tumoral desde hace 20 años en el laboratorio de inmunopatologías apoyado por la Agencia de Promoción Científica y Tecnológica de la Nación y las fundaciones Sales y Bunge y Born. #oncologia
- Oportunidad profesional en innovación social
Vacante cubierta. Analista de Proyectos de Innovación Social Descripción de la posición Colabora en el diseño y la gestión de proyectos de innovación en educación, primera infancia y/o salud pública. Acompaña la implementación de procesos y sistemas de monitoreo y evaluación de impacto social. A través del análisis de datos, testea las hipótesis de impacto y da sustento a la toma de decisiones por parte del equipo directivo de la Fundación. Administra becas y subsidios otorgados a otras instituciones incluyendo tareas de seguimiento y evaluación: definición de objetivos, documentación, revisión presupuestaria y de entregables; brinda orientación técnica a los beneficiarios; realiza visitas a los sitios de implementación; elabora informes de resultados. Coordina y documenta los aportes de los miembros del equipo programático. Desarrolla y monitorea Gantts basados en hitos para evaluar el cumplimiento de los objetivos y detectar oportunidades de optimización del tiempo y de los recursos. Diseña y coordina encuestas y otros instrumentos de relevamiento de campo. Redacta notas conceptuales, revisiones bibliográficas y otros documentos clave, así como también informes y presentaciones para diferentes audiencias internas y externas. Conocimientos básicos y habilidades requeridas Diploma de grado (valorado contar con diploma de posgrado). Formación académica cuantitativa y experiencia comprobable en el procesamiento e interpretación de datos. Al menos 3 años de experiencia profesional relevante. Capacidad de trabajo independiente y proactivo en la búsqueda de soluciones a problemas no estructurados. Alto grado de organización para trabajar de manera eficiente en múltiples proyectos simultáneos. Alto grado de iniciativa personal e innovación. Habilidades interpersonales y de comunicación verbal y escrita para vincularse eficazmente con grupos internos y externos. Flexibilidad, eficiencia. Excelente dominio del idioma inglés (oral y escrito). Preferentemente manejo avanzado de paquetes estadísticos, MS office y sistemas de gestión de contenidos (Salesforce). ¡Sumate a nuestro equipo! Envianos tu CV actualizado, incluyendo al menos tres referencias comprobables, antecedentes académicos, y remuneración mensual pretendida a info@fundacionbyb.org indicando en la referencia del mail “Analista de Proyectos de Innovación Social”.
- Desarrollan un detector portable para Chagas y leishmaniasis
Investigadores del CONICET y la Universidad Nacional de Salta trabajan en el desarrollo de una plataforma de diagnóstico para enfermedades desatendidas. El objetivo es que se pueda implementar en centros de salud pública alejados de las grandes ciudades, donde suele haber mayor necesidad de detección y menos recursos para su atención. Agencia TSS / UNSAM, 21 de febrero de 2019 – El Chagas y la leishmaniasis tienen varias cosas en común. En primer lugar, pertenecen al grupo de enfermedades desatendidas, que afecta principalmente a poblaciones que viven en condiciones de pobreza y en zonas de altas temperaturas. En la Argentina, la región más afectada es el norte del país, especialmente las provincias de Santiago del Estero, Formosa, Chaco y Salta. En segundo lugar, ambas son transmitidas por parásitos que utilizan insectos como vectores. El causante de la enfermedad de Chagas es el Trypanosoma cruzi, que se transporta gracias a la vinchuca, mientras que los parásitos del género Leishmania se valen de la picadura de un mosquito flebótomo, el jején. En los dos casos, el diagnóstico temprano es fundamental para tratar los síntomas y mejorar la calidad de vida del paciente. Un equipo de investigadores del Instituto de Patología Experimental, perteneciente a la Universidad Nacional de Salta y el CONICET (IPE–UNSa/CONICET), está desarrollando una plataforma portable para el diagnóstico molecular de Chagas y leishmaniasis. El objetivo es crear una herramienta de implementación rápida y sencilla en centros de salud alejados de las grandes ciudades, donde suele haber mayor prevalencia de estas enfermedades y menos recursos para su atención. El método más eficiente para diagnosticar Chagas es la serología, que consiste en detectar la presencia de anticuerpos en la sangre. Sin embargo, esta técnica no sirve para casos congénitos en recién nacidos, ya que los anticuerpos de la madre pasan al bebé a través de la placenta y perduran en la sangre por varios meses. La única manera de dar un diagnóstico certero es observar la presencia del parásito en el microscopio, algo difícil de lograr con una pequeña muestra de sangre. “No hay un método lo suficientemente sensible y práctico para diagnosticar casos de Chagas congénito. Se puede hacer mediante una muestra de ADN pero esto requiere de una infraestructura y de equipos que no son habituales en la mayoría de los centros de salud pública del norte”, le dijo a TSS el doctor en Ciencias Biológicas Patricio Diosque, director del IPE y del proyecto. En diciembre, el desarrollo fue premiado con 2,5 millones de pesos en un concurso de la Fundación Bunge y Born que busca fomentar la “investigación de enfermedades infecciosas en contextos sociales vulnerables”. El desarrollo del grupo que lidera Diosque se basa en la inmunocromatografía en tiras de flujo lateral. La particularidad de este método es que se trata de una amplificación isotérmica: no requiere un equipo complejo que suba y baje la temperatura, como sucede habitualmente, sino que se realiza siempre a la misma temperatura (37°), lo que facilita la programación y utilización del dispositivo. “El resultado del procedimiento se observa en una tira de flujo lateral que permite una detección visual similar a las pruebas de embarazo. Estimamos que el proceso podría lleva unas dos horas”, dijo. Para desarrollar este método, los investigadores pusieron el foco en determinadas secuencias de ADN que ya se utilizan para el diagnóstico y las estudiaron en mayor profundidad. Para recortar el fragmento que necesitan utilizan la tecnología CRISPR, también conocida como “tijeras génicas”. Una vez seleccionada la secuencia, realizan una amplificación, algo así como sacar muchas copias para detectar mejor la presencia del parásito. En el caso de la leishmaniasis, se usa la misma técnica pero, en vez de una muestra de sangre, se usa una del tejido de la lesión. “Estamos finalizando la selección de las secuencias que van a ser utilizadas y nos enfocamos principalmente en hacer una distinción entre los linajes del T. cruzi y las especies de Leishmania. A la vez, estamos poniendo a punto la amplificación isotérmica sin la utilización de equipos complejos (termocicladores)”, precisa el biólogo. Los investigadores estiman que, además de sencillo y rápido, el método no sería costoso a la hora de implementarlo. Sin embargo, Diosque considera que, para pasar a la etapa de aplicación, es importante el apoyo del Estado a este tipo de investigaciones ya que “al tratarse de enfermedades desatendidas, no resultan rentables para los grandes laboratorios farmacéuticos”. Con respecto a la crisis que atraviesa el sector científico, el investigador le dijo a TSS que el IPE está teniendo “inmensas dificultades” para desarrollar su trabajo. “La situación del instituto es crítica. Estamos empezando a usar el dinero destinado a la compra de insumos para cubrir gastos básicos de funcionamiento. Yo llevo 20 años en el CONICET y nunca habíamos pasado por una situación similar. Esto es una decisión política porque, más allá de que el país tiene un endeudamiento muy grande, los fondos para ciencia representan un porcentaje ínfimo en el presupuesto general de la Nación. Evitar que el sistema científico-tecnológico se venga abajo es posible pero se necesita voluntad política”, finalizó. #chagas #infecciosas
- Sandra Díaz y Lucas Garibaldi, ganadores de los Premios Científicos Fundación Bunge y Born 2019
En una nueva edición de los Premios Científicos de la Fundación Bunge y Born, nos enorgullece homenajear la trayectoria y los aportes de dos científicos argentinos destacados en ecología. Sandra Myrna Díaz, ganadora del Premio Fundación Bunge y Born 2019, es Doctora en Biología por la Universidad Nacional de Córdoba, Doctora Honoris Causa por la Universidad de Buenos Aires, e Investigadora Superior del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET). En palabras del jurado, "Sandra Díaz ha jugado un papel fundamental en el desarrollo del concepto de diversidad funcional, que se define como el tipo, rango y abundancia relativa de los caracteres funcionales presentes en una comunidad". A su vez, "a través de contribuciones teóricas, metodológicas y empíricas, ha demostrado cómo los caracteres biológicos de las plantas vasculares influyen sobre su vulnerabilidad al cambio climático, y las consecuencias que esto trae para el funcionamiento de ecosistemas". Sandra Díaz es miembro de las Academias de Ciencias de Argentina, Estados Unidos, Francia y el Mundo en Desarrollo, miembro honorario de la Sociedad Británica de Ecología, y miembro extranjero de la Royal Society de Londres. Anteriormente, recibió el Premio Cozzarelli (2008), el Premio Margalef en Ecología (2017), el Premio Senckenberg para la Investigación de la Naturaleza (2019) y el Premio Gunnerus en Ciencias de la Sostenibilidad (2019). Fue mencionada por la revista Nature, en 2018, como uno de los cinco científicos to watch (para mirar) en 2019 por co-liderar el Informe Global de la Plataforma Intergubernamental sobre Biodiversidad y Servicios Ecosistémicos (IPBES). Lucas Alejandro Garibaldi, ganador del Premio Estímulo 2019, es Doctor en Ciencias Agropecuarias por la Universidad de Buenos Aires. Actualmente, es el Director de la Sede Andina del Instituto de Investigaciones en Recursos Naturales, Agroecología y Desarrollo Rural de la Universidad Nacional de Río Negro. El jurado describió que "con una fuerte impronta cuantitativa y estadística, uno de los aportes más significativos de Lucas Garibaldi consistió en la demostración de que la diversidad y abundancia de polinizadores silvestres son más importantes que la abundancia de la abeja doméstica en el servicio de polinización de muchos cultivos". Asimismo, el jurado destacó como notable su "interés por difundir y hacer llegar las implicaciones de sus hallazgos científicos a la sociedad". ¡Felicitaciones a los galardonados! #premiofbb #ecologia
- El Club Atlético Huracán suma esfuerzos por el empleo joven en el sector de la salud
El Club Atlético Huracán se suma a los cursos gratuitos de formación en salud que lleva adelante el Hospital Británico en el marco de un programa conjunto de la Fundación Bunge y Born y HSBC Argentina. DIARIO POPULAR, 30 de junio de 2019 - En el marco del Programa Habilidades para el Futuro de la Fundación Bunge y Born y HBSC Argentina, el Hospital Británico trasladó sus acciones solidarias a la Comuna 4 donde ofrece capacitaciones en entidades como la Parroquia Caacupé, situado en avenida Osvaldo Cruz 3470, dentro de la Villa 21-24 de Barracas, así como en la sede del Club Atlético Huracán. Destinados a personas que habitan en comunidades vulnerables, estos cursos gratuitos tienen como objetivo brindar nuevos conocimientos y herramientas para mejorar el perfil laboral de los estudiantes, permitiendo ampliar sus oportunidades de empleo en el ámbito de la salud. Las especialidades que ofrece actualmente el nosocomio remiten a capacitaciones de asistente geriátrico, asistente de salud y camillero, perfiles que son fuertemente demandados en el mercado laboral de la salud. Se estima que, a fines de 2019, la Escuela de Enfermería del Hospital Británico habrá dictado 20 cursos de empleabilidad, beneficiando a más de 700 personas en situación de vulnerabilidad en Capital Federal y el conurbano bonaerense. #habilidadesparaelfuturo #hsbc #enfermeria
- Subsidios de investigación en enfermedades infecciosas y vulnerabilidad social
En Argentina, enfermedades infecciosas tales como Chagas, Tuberculosis, Hepatitis B y C, Influenzas, Neumonías y Bronquiolitis, son las más extendidas y afectan a millones de personas en todo el país, especialmente a poblaciones que viven en contextos sociales vulnerables, con acceso limitado a servicios de salud pública. Por segundo año consecutivo, la Fundación Bunge y Born ofrecerá subsidios de hasta AR$3 millones a proyectos interdisciplinarios de investigación aplicada que identifiquen modelos de intervención efectivos y puedan ser escalados a las políticas públicas. El objetivo es generar conocimiento novedoso para ayudar a prevenir y reducir de manera eficaz la carga sanitaria, social y económica de enfermedades infecciosas en contextos sociales vulnerables de la Argentina. Formulario de inscripción Términos de referencia Instructivo de aplicación Documentos modelo
- Desafío SPARK 2019
Desafío SPARK es un concurso para docentes, directivos y supervisores que trabajan en escuelas de contextos rurales de la Argentina. Participá, ganá y sé parte de SPARK el próximo 6 de septiembre en la ciudad de Córdoba. Bases y condiciones → Formulario de inscripción → #spark #cordoba
- Osvaldo Sala: Existen soluciones al cambio climático
Osvaldo Sala, reconocido especialista argentino en ecología, que trabaja en Estados Unidos, cree que uno de los motivos por los que los políticos no prestan atención al tema es que el fruto de las inversiones se ve a largo plazo. EL DÍA DE GUALEGUAYCHÚ, 15 de junio de 2019 - No existe ninguna duda: el cambio climático existe. “El 99.9% de los científicos está de acuerdo en que el planeta está calentándose a una velocidad extraordinaria y que eso es resultado de la actividad humana.” El que habla es Osvaldo Sala, un “producto” argentino de exportación de altísima calidad, aunque tal vez sería más correcto hablar de “servicio” de exportación, ya que es uno de los tantos cerebros nacionales que desarrolla su trabajo fuera del país. Ingeniero agrónomo por la UBA, se fue a Estados Unidos por primera vez en 1979 con el objetivo de hacer un doctorado en la Universidad del Estado de Colorado. Desde entonces, fue y volvió varias veces. Trabajó en las universidades de Colorado, Stanford y Brown –en el medio recibió distinciones acá y allá-, hasta que en agosto de 2010 se sumó a la Escuela de Sostenibilidad de la Universidad Estatal de Arizona. Como presidente del Comité Científico sobre Problemas del Medio Ambiente y autor coordinador de la Evaluación de los Ecosistemas del Milenio, Sala es un reconocido líder internacional en Ciencia Ecológica y Política Ambiental Global. Tal como ocurre desde 1964, la Fundación Bunge y Born organizó los premios científicos que en la edición 2019 estuvieron dedicados a la Ecología y contaron con Sala como presidente de un prestigioso jurado internacional (ver “Reconocimiento al talento argentino”). De paso por Buenos Aires, Sala, quien es miembro electivo de la Academia Nacional de Ciencias de EE.UU. (integrante de varias academias y asociaciones en USA y en la Argentina), presidente de la Sociedad de Ecología norteamericana, becario Guggenheim y quien dos veces recibió el Premio Bernardo Houssay, dialogó con El Día. En el arranque cuenta que la Arizona State University School of Life Sciences and School of Sustainability es una Universidad muy grande para los estándares de EE.UU.. “Tiene alrededor de 115.000 alumnos y estoy muy contento trabajando ahí. Es muy diferente de la Universidad de Brown”, dice. -¿En qué sentido? -La Universidad de Brown es muy elitista. Ellos miden la excelencia por el número de aspirantes a los que se rechaza. Si no ingresa al 90% de los alumnos que se presentan, eso es un indicador de la excelencia. En esta Universidad pensamos que la excelencia y la inclusión no son necesariamente opuestas, sino que pueden ocurrir simultáneamente. En Brown definían la excelencia como la exclusividad. Nosotros pensamos que el valor que le damos a la sociedad es la diferencia entre cómo ingresan los alumnos y cómo salen (cuando terminan de cursar). De los que salen, evidentemente los mejores alumnos serán un poco mejores, y los que no eran muy buenos saldrán mejor. Esa creo que es la principal contribución de una Universidad a la sociedad. -¿Existe el cambio climático o es una sensación? ¿Cuáles son los motivos para negarlo? Están quienes hablan de que somos la última generación que puede hacer algo para revertirlo y quienes como el presidente Trump lo niegan. - No existe ninguna duda de que existe. El 99.9% de los científicos está de acuerdo en que el planeta está calentándose a una velocidad extraordinaria y que eso es resultado de la actividad humana. Hay miles de evidencias y todas apuntan en la misma dirección. Me parece que el presidente Trump niega el cambio climático porque apoya los intereses de las empresas que venden combustibles fósiles, carbón… No hay un solo científico que niegue el cambio climático: el Ártico se está derritiendo, lo del nivel del mar, sube la temperatura… Fuera de todo eso, sabemos que si tenemos el tanque de nafta del auto lleno, cuando se vacía, parte de la energía que estaba en el combustible es la que hizo que el auto funcionara, y lo que emite por el caño de escape, que es dióxido de carbono, es un gas que atrapa la radiación que emite la Tierra. De todo eso no hay ninguna duda. Las razones por las que algunos políticos pretenden postergar la acción es que tiene consecuencias económicas para algunos sectores. -Lo que queda en claro es que ya no se trata exclusivamente de una lucha de “ecologistas”, sino que el cambio climático producen variaciones en los ecosistemas y con ello surgen nuevas enfermedades… -Totalmente. Además, las soluciones para el cambio climático existen. Hay soluciones tecnológicas y tienen costos perfectamente soportables por parte de la sociedad. No es que se trata de atender la pobreza o esto. -¿La situación es tan grave como dicen quienes sostienen que somos la última generación que puede revertirlo? -Sí, es así. La cuestión es que se trata de esas cosas en las que es difícil conseguir un consenso porque tiene esa particularidad de que las inversiones se tienen que hacer ahora para prevenir algo que sucederá en el largo plazo. Es lo mismo que cuando intentás explicarle a alguien que fuma que es necesario que deje de hacerlo ahora, porque si lo hace ahora, no pasará nada, pero si continúa se morirá en 20 o 30 años. -Ud habla de “sistemas socio-ecológicos”, ¿qué significa exactamente eso y para qué sirve analizarlos? -Los seres humanos tenemos actividades que interactúan con los ecosistemas y los ecosistemas afectan a los sistemas humanos. Entonces en vez de hablar de sistemas ecológicos, que solo tienen plantas, animales y microorganismos, trabajamos en sistemas que tienen plantas, animales, microorganismos y seres humanos, que son actores que afectan a los ecosistemas. -Ha trabajado en ámbitos bien diferentes desde el punto de vista geográfico: desde la estepa patagónica, los pastizales de California y las estepas de Colorado, a los desiertos del sur de África, y actualmente tiene experimentos en el Desierto Chihuahuense en Nuevo México. ¿Hay algún lugar del planeta del que podamos decir que está a salvo del cambio climático? -Sin duda que el cambio climático es un cambio global, es el cambio de clima del planeta. No hay ningún lugar que quede a salvo. Pero por otro lado, el cambio climático es heterogéneo: en algunos sitios lloverá más y en otros menos; en algunas partes subirá el nivel del mar. Lógicamente que si vivís en Salta el nivel del mar no te afectará pero probablemente el clima estará más seco y caliente. El planeta es heterogéneo y la gente será afectada por el cambio climático de una manera heterogénea. Refugiados climáticos Un fenómeno social no menor desde el punto de vista de los efectos del cambio climático es el de los refugiados climáticos. Hay proyecciones que indican que debido al aumento del nivel del mar podrían desaparecer islas completas. Si hoy el mundo no es capaz de gestionar algunos millones de personas que por razones políticas se ven obligadas a desplazarse, ¿qué pasará con los entre 300 y 400 millones de personas que viven en zonas bajas de países en desarrollo si el nivel del mar sube? -¿Hay alguien pensando o proyectando eso a nivel global o institucional? -Volvemos a la mirada de sistema socioecológico. Uno podría mirar solamente lo que pasa con el nivel del mar, pero hay que hacerlo a la luz de cómo los seres humanos son afectados por eso, y cómo ellos afectan. Y ahí entramos en el terreno de la política internacional y cómo ciertos países pueden ayudar a otros países. -Teniendo en cuenta la decisión de Trump de retirar a EE.UU. del Acuerdo de París contra el Cambio Climático, ¿son esas instancias las que sirven para resolver estas cuestiones? Hoy vivimos un momento de replanteo de toda la infraestructura institucional del mundo. -Hay muchos ámbitos y no está muy claro cuál es… por ejemplo en Estados Unidos hay un nivel federal con un presidente que es Trump, y el Congreso, pero el país también tiene Estados, y en general si los comparás con las provincias argentinas, tienen mayor peso político. EEUU es un país más federal. El Estado de California, por ejemplo, aprobó una ley que establece que para 2050 será neutral con respecto al carbono. Y por el tamaño de su economía, si California fuera un país, sería la quinta economía del mundo. Eso es muy importante y ocurre independientemente de que el gobierno federal quizá tenga una política que pretende ignorar el cambio climático. Y así como los Estados, hay ciudades que son mucho más conscientes. Me parece que la solución al cambio climático no es una sino una multitud de soluciones políticas, institucionales, tecnológicas. Y la tecnología para resolver el cambio climático no pasa solo por paneles solares, pasa por paneles solares, energía eólica, reducir el consumo, aumentar la eficiencia, y podría seguir enumerando cosas durante media hora. No hay una solución, hay muchas. -¿Qué rol tenemos en el cambio climático en nuestra vida cotidiana? Como simples ciudadanos, ¿qué peso tiene lo que consumimos y la forma en la que lo hacemos? -La solución es una combinación de medidas de arriba hacia abajo y de abajo hacia arriba. En general suelen ser más eficientes los cambios de arriba hacia abajo. Por ejemplo, todos podemos tratar de consumir menos energía, pero si la energía aumenta el precio, a todos les llega el mensaje de modo muy claro. -Acaba de presidir el Jurado de los premios científicos de la Fundación Bunge y Born, ¿cómo ve la ciencia en la Argentina hoy? -La ciencia argentina tiene un potencial muy grande. Parte de mi trabajo fue armar el jurado. Fue un grupo de reconocidos y prestigiosos especialistas internacionales y todos quedamos impresionados con la calidad de los candidatos que había. Hubo que elegir a algunos porque así funciona, pero pudieron haberse llevado el premio muchos otros porque eran trabajos muy valiosos. La Argentina tiene un capital intelectual muy importante y al mismo tiempo subidas y bajadas en cuanto al nivel de financiamiento… -¿Es con más dinero que se promueve/mejora el estudio y desarrollo de las ciencias en un país? ¿O es necesario cambiar de raíz la matriz educativa para despertar la curiosidad de los chicos en las ciencias? -Como pasa con el cambio climático, no hay una solución única para mejorar el nivel científico. El dinero es muy importante, pero el dinero solo no lo resolverá, y está claro que sin dinero tampoco se arregla. Cada una de esas idas y venidas con la política de financiamiento se traduce en pérdidas irreversibles para la cultura y la investigación científica en el país. Los científicos que se van, generalmente no vuelven. -¿En qué consiste el Asombro Institute (Instituto Asombro)? En algunos videos se ve a chicos del secundario en medio del desierto, experimentando… -El equivalente del Conicet, que es el organismo que financia gran parte de mi trabajo, siempre pide que un porcentaje de tu tiempo y esfuerzo sea dedicado a la formación de recursos humanos. Parte de mi trabajo es llegar a los chicos y cambiar esa imagen de que ser científico significa tener puesto un guardapolvo blanco y estar en un laboratorio. Acercarlos al mundo de las ciencias desde otro lugar. Reconocimiento al talento argentino Osvaldo Sala, con una reconocida trayectoria en temas de trabajo en el campo de la ecología (controles del agua sobre la dinámica del carbono y el nitrógeno en los ecosistemas áridos y semiáridos, consecuencias de los cambios en la biodiversidad en el funcionamiento de los ecosistemas, y desarrollo de escenarios de biodiversidad para los próximos 50 años, entre otros) presidió el Jurado de la edición 2019 de los premios científicos de la Fundación Bunge y Born. Los premios científicos Bunge y Born “son una valoración de la persona y de la obra científica para la sociedad” y se encuentran entre los reconocimientos más importantes a la actividad científica argentina. El Premio Fundación Bunge y Born se entrega anualmente desde 1964, y en 2001 se sumó el Premio Estímulo. Ambos alternan entre distintas disciplinas: agronomía, biología, bioquímica, física, geología, ingeniería de procesos, medicina, paleontología, química y veterinaria. La supervivencia de la Tierra “La ecología es la disciplina central para resolver el desafío más importante de esta generación que es lograr la sustentabilidad de nuestro planeta”, dijo Sala. El experto detalló que “el cambio climático, junto a los cambios en el uso de la tierra ponen en peligro el futuro de la humanidad”, y que la ecología “provee el conocimiento fundamental que es necesario para entender los impactos del cambio global y diseñar un camino hacia la sustentabilidad”. El Jurado que presidió Sala, estuvo integrado además por Elvira Cuevas (Departamento de Ecología de la Universidad de Puerto Rico y Miembro de la Academia de Ciencias de América Latina), Rodolfo Dirzo (Universidad de Gales, profesor de Ciencias Ambientales y director del Departamento de Biología de la Universidad de Stanford), Ernesto Medina (Universidad de Hohenheim, Alemania; científico adjunto del Instituto Forestal Tropical Internacional y profesor de la Universidad de Puerto Rico); y Francisco Pugnaire, (Universidad de Granada; científico titular del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, miembro del Comité Español de Investigación en Cambio Climático Global, entre otras). Los expertos otorgaron el Premio Fundación Bunge y Born a la ecóloga Sandra Díaz, investigadora del Conicet y copresidenta de la Plataforma Intergubernamental sobre Biodiversidad y Servicios Ecosistémicos (Ipbes) de las Naciones Unidas. Díaz, nacida en Bell Ville y graduada en la Universidad Nacional de Córdoba (UNC), es una pionera en la biología de las plantas vasculares y su vulnerabilidad al cambio climático que acaba de ser distinguida también con el Premio Princesa de Asturias y ha contribuido a desarrollar una herramienta metodológica para cuantificar efectos y beneficios de la biodiversidad de las plantas, y la ecología vegetal de los ecosistemas, y su aprovechamiento en forma de combustible, materiales, medicinas, tintes, alimentación, protección hídrica y otros aportes. También investigó el papel de la biodiversidad para contrarrestar el cambio global, por ejemplo, mediante el secuestro de carbono atmosférico. Trabaja en el desarrollo de plantas capaces de absorber hasta 20 veces más dióxido de carbono que las normales mediante edición génica. Es miembro electo de la Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos, de la Academia de Ciencias de Francia y de The Royal Society. También recibió el Konex de Platino en Biología y Ecología, el Zayed al Liderazgo en Medio Ambiente, el Bernardo Houssay y el Ramón Margaleff de Ecología. El premio Estímulo 2019 de la Fundación Bunge y Born fue para Lucas Garibaldi, director del Instituto de Investigaciones en Recursos Naturales, Agroecología y Desarrollo Rural de la Universidad Nacional de Río Negro (UNRN). #premiofbb #ecologia
- El brillo de nuestros científicos
LA NACIÓN, 17 de junio de 2019 - Afortunadamente, aunque algunos todavía se empecinen en ignorar o soslayar los graves efectos del cambio climático sobre nuestra casa común, quienes asistimos preocupados a terribles pronósticos nos alegramos también de saber que desde la ciencia y la tecnología se trabaja incansablemente para acotar o reducir los impactos que contrarresten la falta de los consensos necesarios en este campo. Sandra Myrna Díaz, bióloga cordobesa reconocida con numerosas distinciones que la convirtieron en referente científico internacional, acaba de recibir el Premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica, poco después de haber recibido en nuestro país el que entrega la Fundación Bunge y Born, que en esta edición se ocupó de la Ecología. Sobre 45 candidaturas de 23 nacionalidades, Díaz y su colega estadounidense Joanne Chory compartieron el reconocimiento por sus trascendentales aportes en la defensa de la diversidad biológica. Una de sus contribuciones consistió en su análisis del papel de la biodiversidad para contrarrestar el cambio climático mediante el secuestro de carbón atmosférico. Sus trabajos se vinculan con los de Chory, quien trabaja desde California en una iniciativa dirigida al desarrollo de plantas que puedan absorber hasta 20 veces más dióxido de carbono del aire que las normales a través de la edición genética. Egresada de la Universidad Nacional de Córdoba, donde ejerce la docencia, además de ser investigadora superior del Conicet, Díaz es fundadora de Núcleo DiverSus, una red interdisciplinaria de investigación sobre biodiversidad y sostenibilidad con proyección global. Por otro lado, 11 argentinos que trabajan en biología, bioquímica, física y química se sumaron en estos días a la Academia de Ciencias de América Latina: Alejandro Schinder, Fernanda Ceriani, José Luis Daniotti, Rafael Calvo, Eduardo Fradkin, Alicia Godeas, Néstor Carrillo, Andrés Muro, Rosa Erra Bassels, Mario Guido y Teodoro Kaufman. Sobran ejemplos del prestigio alcanzado por profesionales argentinos que trabajan desde nuestra tierra o desde el extranjero, confirmando el valor de nuestra educación superior, capaz de potenciar capacidades que luego el mundo reconoce. Celebremos sus logros y apostemos a quienes puedan continuarlos, destinando los recursos necesarios a su formación, para que la ciencia argentina siga brillando en el mundo. #premiofbb #ecologia
- Se presentaron las investigaciones del subsidio Jorge Oster en Oncología 2018
El Subsidio Jorge Oster en Oncología, dedicado a acompañar a profesionales de la salud en el perfeccionamiento y actualización de conocimientos en el exterior, tuvo su cierre para 2018. Los integrantes del jurado escucharon las exposiciones de los investigadores beneficiados con el subsidio, quienes compartieron los conocimientos de vanguardia adquiridos en el exterior y su implementación a su regreso al país. Para más información sobre cada proyecto, clickea acá. Ganadores: Héctor Adrián Cuello Universidad de California, San Diego (Estados Unidos) Gianina Demarchi Universidad Católica de Leuven (Bélgica) Mario Alejandro Lorenzetti University College London (Reino Unido) María Cecilia Perrone Beth Israel Deaconess Medical Center, Harvard Medical School (Estados Unidos) Lucas Facundo Staringer Instituto Catalán de Oncología (España) Facundo Tonucci Centro de Investigación del Cáncer, Universidad de Salamanca (España) Jurado: Presidente Pablo Menéndez Instituto de Oncología Ángel H. Roffo Vicepresidente Ángela R. Solano Facultad de Medicina, UBA Vocales Daniel Alonso Universidad Nacional de Quilmes María Alejandra Avagnina CEMIC Carlos Bas Hospital Alemán Rubén González Villaveirán Sanatorio Mater Dei Clelia Vico Hospital José María Penna
- Acuerdo de colaboración con la Provincia de Córdoba
GOBIERNO DE LA PROVINCIA DE CORDOBA, 7 de junio de 2019 - Con el fin de realizar actividades de cooperación institucional y asistencia técnica en favor del desarrollo de eventos que favorezcan el proceso de enseñanza y aprendizaje en la Provincia de Córdoba, el ministro de Educación Walter Grahovac y la presidenta de la Agencia Córdoba Joven, Julieta Rinaldi, firmaron hoy un convenio de colaboración con representantes de la Fundación Bunge y Born y la Fundación Perez Companc para llevar a cabo actividades en conjunto que mejoren la calidad de la educación en la provincia de Córdoba. El acuerdo prevé cooperación institucional y asistencia técnica, además de aclarar que las acciones, proyectos y actividades específicas que vayan a realizar serán instrumentados mediante acuerdos específicos suscriptos oportunamente, tales como el que acompaña el convenio de colaboración. A través del primer entendimiento específico, tanto las dependencias del gobierno provincial como las fundaciones acordaron trabajar mancomunadamente en el desarrollo de Spark en el mes de septiembre, un encuentro de ciencia, arte y tecnología que busca impulsar el intercambio de ideas creativas para la resolución de problemas educativos; identificar oportunidades para potenciar la enseñanza, gestión y/o supervisión en contextos escolares rurales; y compartir prácticas educativas positivas que tengan potencial para trascender fronteras geográficas, interdisciplinares, y culturales. Este encuentro nace del compromiso con la promoción, difusión y desarrollo de nuevos enfoques, tanto en las instituciones educativas como en los actores que forman parte del sistema escolar, planteado por las fundaciones, que impulsan el Programa Sembrador; iniciativa que consiste en contribuir al fortalecimiento de escuelas de contextos rurales. Mientras que el Ministerio pondrá a disposición el espacio físico para el evento, que deberá contar con una capacidad máxima de 500 personas, las fundaciones se encargarán de organizar y llevar adelante el concurso Desafío SPARK, destinado a docentes, directivos y supervisores que trabajen en escuelas de nivel inicial, primario o secundario en contextos rurales de la Argentina y tengan propuestas innovadoras que vinculen ciencia, arte y tecnología. Las mejores propuestas ganarán un viaje y estadía en Córdoba para participar del encuentro. Participaron también, el secretario de Relaciones Institucionales de la cartera educativa, Carlos Sánchez; las subdirectoras de Educación Rural Primaria y Secundaria, Mirta Urbano y Cecilia Soisa respectivamente; vocales de Córdoba Joven y demás funcionarios provinciales. #cordoba #spark #fpc #sembrador












