A pesar de la mejora del tratamiento y el aumento de la conciencia del cáncer colorrectal este sigue siendo un importante problema de salud. Es el tercer cáncer más común en hombres y el segundo tipo de cáncer más frecuente en las mujeres en todo el mundo. Aproximadamente un tercio se encuentra en el recto y la radioterapia juega un rol clave en su tratamiento. El tratamiento estándar para el cáncer de recto localmente avanzado es la quimiorradioterapia (CRT), seguida de la resección total del mesorrecto (TME) con un intervalo previo libre de tratamiento de 6 a 8 semanas. Buenas respuestas al tratamiento pueden ser candidatos para la cirugía con conservación del esfínter y ahorrar el impacto social, psicológico y sexual de los cuidados del ostoma permanente. En nuestra institución la planificación del tratamiento radioterápico se realiza con una técnica 3D, técnica que permite valorar la distribución de la dosis tanto en volúmenes de tratamiento como en los órganos a riego circundantes, si bien esta permite una dosificación de los órganos a riesgo adecuada, todavía acontecen morbilidad asociadas al tratamiento que afectan de forma negativa la calidad de vida de los pacientes. Este proyecto de trabajo tiene como objetivo realizar entrenamiento y puesta en marcha a mi regreso de nuevas tecnologías (IMRT) para mejorar el índice de eficacia-toxicidad y la calidad de tratamiento otorgado al paciente.